La 21era Gran Fiesta del Deporte Juan Alberto Poteca, que se realizará el jueves 19 de diciembre a partir de las 21:00, en el Salón Dorado del Complejo Las Barrancas del Club Del Valle, está a la vuelta de la esquina y el Círculo de Periodistas Deportivos de Necochea, confirmó otra figura destacada para la gala que se desarrollará el venidero jueves. Se trata de la histórica figura del básquetbol argentino, Adolfo Rubén Perazzo.
El popular “Gurí” fue un basquetbolista emblemático durante las décadas del 70 y 80, donde se destacó en Gimnasia y Esgrima de La Plata, Boca Juniors, Sporting de Mar del Plata, de paso además por el básquetbol italiano, pero fundamentalmente es recordado por la huella indeleble que dejó vistiendo los colores de los dos “colosos” de Mar Del Plata. Peñarol y Quilmes, ya que con ambos conjuntos logró el ascenso a la Liga Nacional de Básquetbol. También los necochenses, lo tenemos en nuestras retinas al mercedino (nacido el 20 de mayo de 1951), defendiendo la casaca del “Milrayitas” marplatense en los duelos encarnizados de 1985 y 1986, entre Peñarol ante nuestro Rivadavia, que tenía en sus filas a Neal Robinson y Leroy Moreno, en los albores de la Liga.
Además, Perazzo tiene antecedentes deportivos muy cercanos en su familia, debido a que su padre (también de nombre Adolfo), fue un destacado piloto en la génesis del Turismo Carretera y quinto en las tradicionales “Mil Millas Argentinas” de 1941, que obtuvo Juan Manuel Fangio.
Asimismo Perazzo, estuvo a punto de representar a la Argentina como atleta en un Sudamericano de Lanzamiento de Bala, pero el destino quiso que por su crecimiento físico en tan corto tiempo y por lo que despertaba en Mercedes, su coterráneo y otro histórico del deporte de la “Naranja” tal el caso de Héctor Ismael Barreneche, quien se acercó y le consultó si no le gustaba el básquet, hicieron que su derrotero se incline por este deporte. Donde en base a su potencia para descolgar rebotes y su capacidad para mejorar día a día, logró títulos en Gimnasia y cuatro campeonatos nacionales con la selección de Provincia de Buenos Aires.
Pero el apellido Perazzo, está ligado a la historia de la selección nacional. Con la casaca “Albiceleste”, el ala pivot representó a nuestro país desde 1971 a 1985. En ese lapso, jugó 87 partidos, marcó 915 puntos y obtuvo los títulos Sudamericanos de Medellín en 1976 y de Bahía Blanca en 1979.

No obstante, lo que más se recuerda de Aldolfo Perazzo en su periplo por el combinado nacional, es su destacada labor en el Preolímpico clasificatorio para los Juegos Olímpicos de Moscú de 1980, que se llevó a cabo en el Estadio Roberto Clemente, de San Juan de Puerto Rico. En “Tierras Boricuas”, el conjunto dirigido por Miguel Ángel Ripullone, con el asesoramiento del prestigioso DT de la por entonces Yugoslavia, Ranko Zeravika, más el aporte de otros notables jugadores como; Carlos Rafaelli, Eduardo Cadillac, Carlos Romano y Miguel Cortijo, entre otros lograron el pasaporte a los Juegos de Rusia, tras finalizar terceros por detrás de Puerto Rico y Canada, en un certamen donde superó por paliza al poderoso Brasil, que contaba con basquetbolistas de la talla de Oscar y Marcel, y a Cuba (potencia continental por ese entonces).
Además aquella clasificación, era la primera del básquetbol nacional, para un Juego Olímpico en 28 años luego del cuarto puesto en Helsinki 1952. No obstante, ese gran éxito deportivo cayó en saco roto, porque la Dictadura Militar que gobernaba en aquel entonces, más el aval del Comité Olímpico Argentino, que comandaba el Coronel Rodríguez, se sumó al boicot de Estados Unidos a los Juegos de la Unión Sovietica, por el conflicto entre la ex URSS y Afganistán. De esa forma, ese grupo de jugadores que habían logrado la clasificación en la cancha y por méritos propios, no pudo viajar a Moscú, en una de las injusticias más grandes de la historia de nuestro deporte.