A partir de esta medianoche, la Federación de Estibadores Portuarios Argentinos (FEPA) comenzará un paro nacional de actividades en el marco de un pleito por representatividad gremial.
La medida de fuerza, que afectará el normal funcionamiento del Puerto Quequén y demás terminales importantes del territorio argentino, tiene relación con el conflicto originado semanas atrás con la empresa Urcel SA de Entre Ríos.
El reclamo se generó ante el pedido de algunos de sus afiliados que denuncian contrataciones precarias, fuera de lo que marca el convenio y despidos por parte de la empresa exportadora de madera Urcel que trabaja en la localidad del sur entrerriano.
Las protestas empezaron en los puertos de Concepción del Uruguay y de Ibicuy en la provincia de Entre Ríos, pero ante la falta de respuestas al reclamo, la organización definió federalizar las medidas.
En distintas declaraciones los trabajadores de puerto Ibicuy se quejan de las condiciones laborales, del sistema de contratación, y irregularidades en la liquidación de sueldos por parte de la empresa exportadora.
Por estas horas, los estibadores de la FEPA realizan una permanencia en el puerto de Ibucuy ante la amenaza de desalojo por parte de la empresa. En el lugar están los trabajadores junto a sus familias.
El conflicto quedaría sin efecto si el ministerio de Trabajo ratifica dictámenes anteriores sobre la representación gremial de los trabajadores de la empresa Urcel SA de Entre Ríos en favor de los SUPA.
