La contadora pública murió el domingo pasado durante una excursión en el glaciar Ojo del Albino, en Ushuaia.
Su padre, Daniel, un empresario hotelero muy reconocido, estaba al frente de las gestiones en nuestra ciudad para recibir el cuerpo, tras la realización de la autopsia.
Como una hija ejemplar, muy estudiosa y amiga fiel definieron a Carla quienes la conocieron tanto en su ciudad natal, como en Tandil, el lugar que adoptó, hace casi una década, para estudiar y vivir.
Allí, en noviembre de 2016, se recibió en Ciencias Económicas junto a Ezequiel, su novio necochense con quien hizo la carrera a la par, en la Universidad Nacional del Centro.
Así como las sierras de Tandil la acompañaron toda su carrera universitaria y sus últimos años, las montañas aparecieron muy ligadas a la vida de Carla y su familia.

En la foto de perfil de su cuenta de Facebook, se la ve en un paisaje serrano junto a su mamá y su hermana menor, Chiara. Las tres y una prima posan en otra imagen frente a la locomotora de La Trochita, en Esquel.
En otras varias fotos, las hermanas aparecen esquiando en Chapelco. La imagen de perfil de su papá Daniel, en la misma red social, lo muestra en la Cordillera del Viento, en Neuquén. En las carpetas interiores, se lo puede ver también en Ushuaia, en el centro de esquí del Cerro Castor.
Después de su hija Carla, la menor, Chiara, también se radicó en Tandil para estudiar Veterinaria. En Necochea quedaron los dos hermanos varones Martín y Luca, encargados en estas horas de contener a la mamá, Noemí Carmen Arias.
Con su marido, regentean el Hotel Presidente, ubicado en la calle 4, entre 81 y 83.
Daniel fue el primer presidente del Ente Necochea de Turismo (Entur), creado durante la gestión del intendente Daniel Molina. Durante varios años estuvo al frente de la Cámara de Hoteleros y hoy sigue integrando la comisión directiva que preside Claudia Calvo.
En la entidad se mostraron consternados por la noticia y colaboran con la familia para la organización del sepelio.

La autopsia
El resultado preliminar de la autopsia confirmó lo que sospechaban: Carla murió de un paro cardiorrespiratorio debido a una descompensación por hipotermia, a raíz de las bajas temperaturas en el lugar.
Carla había viajado a Ushuaia con una amiga y el sábado decidieron tomar una excursión al glaciar Ojo del Albino, tras unos 20 kilómetros de caminata hasta los 900 metros sobre el nivel del mar.
La joven realizó el primer tramo de la excursión, pero comenzó a sentirse mal durante el descenso.
Para realizar la travesía, Ferrelli había contratado una empresa habilitada. Fue en Best Tour Patagonia, aunque el operador a cargo del servicio era la agencia Ushuaia Blanca SRL, conocida como Tierra del Fuego Aventura.

El fiscal Nicolás Arias solicitó que se inicie una investigación por “averiguación de causales de muerte” a la jueza de instrucción María Cristina Barrionuevo. Intentarán determinar si hubo negligencia en el rescate.
El grupo estaba compuesto por cinco personas, un guía y un conductor que los dejó en el inicio del sendero. Carla y su amiga empezaron la caminata y recorrieron la Laguna Esmeralda, el valle y usaron grampones para sortear la nieve hasta llegar a los 900 metros de altura sobre el nivel del mar.
Según confirmaron a Clarín, el tour incluía una comida caliente, infusiones y agua, que el grupo llegó a consumir al llegar al glaciar. La situación, advirtieron, se complicó durante el descenso. Carla empezó a sentirse mal y a sentir mucho frío.
Semana Santa trágica
Será una Semana Santa difícil de olvidar, por lo trágica, para Necochea. El jueves, en un vuelco en la ruta provincial 86, cerca de Benito Juárez, había fallecido una nena de 6 años que viajaba a Azul, con su familia necochense.
A las 72 horas, el domingo, producto de las heridas, murió su papá Alberto Martín Rojas (40). Viajaban además su mamá Soledad Itatí Corcuera (39) y otra hija de 15.
EMJ