Tras haber sido acusado de abuso sexual, y según pudo averiguar Diario Necochea, Nicolás Salguero contó su versión a través de su cuenta de Facebook en donde expresó que se siente “condenado socialmente”.
Hace pocos días, una noticia sacudió al Hospital Irurzun. Es que una trabajadora de este nosocomio denunció que fue abusada por el director, Nicolás Salguero, a quien posteriormente el intendente Arturo Rojas apartó de su cargo.
Por esto, Salguero decidió defenderse y contar su versión de los hechos por medios de la red social Facebook. En su descargo, señaló que está viviendo un momento muy difícil y que buscan perjudicarlo. “Lo que voy a manifestar es que lo revelado por la supuesta víctima se trata de hechos que carecen de veracidad tornando la cuestión de características penales, cuando en realidad no existió ningún acto ilícito de mi parte”, manifestó.
Luego, desmintió haber admitido los hechos denunciados y afirmó que no solo él está sufriendo. “Que lo denunciado no sólo causó daño en mi persona, sino también la exposición y humillación de mi familia, amigos, compañeros de trabajo”, y luego agregó: “La justicia dirá si me cabe responsabilidad o no, aunque en realidad ya me siento condenado socialmente”.
Finalmente, concluyó: “Hoy convivimos en una sociedad que lucha por la igualdad, y es genial, porque la comparto; pero hemos ido perdiendo otros valores como dignidad, honestidad, sinceridad, humanidad, entre otros. Solo pretendo que la justicia actué con ese nivel de igualdad que toda la sociedad pretende y sabiendo que el daño que he recibido ya es irreparable y que es una condena en sí mismo”.
El posteo completo:
Hola buenas tardes!
Estoy pasando uno lo de los momentos más difíciles y horribles de mi vida, viendo que todo lo que he construido con tantos de años de esfuerzo se ha desmoronado. Que con todo lo que han hecho con mi persona,- denunciarme e injuriarme en los medios y en las redes sociales-, me veo en la necesidad de expresar que los hechos no sucedieron como los relataron, se basaron en una sola versión con una clara intención de perjudicarme.
Que por el presente no voy a dar precisiones de lo ocurrido ya que para ello existe otro ámbito, que es la justicia, en la cual ya me he puesto a disposición. Lo que si voy a manifestar es que lo revelado por la supuesta víctima se trata de hechos que carecen de veracidad tornando la cuestión de características penales, cuando en realidad no existió ningún acto ilícito de mi parte.
Se dijo además que había admitido los hechos denunciados, situación que nunca sucedió. Nadie solicitó mi versión de los hechos.
Que lo denunciado no sólo causó daño en mi persona, sino también la exposición y humillación de mi familia, amigos, compañeros de trabajo, y en especial hacen perder valor a todo lo bueno que se realizó en mi dirección a cargo del Hospital Municipal de Quequén.
Que no me causa sorpresa que el Sindicato de Empleados Municipales –Necochea haya apoyado tamaña mentira, ya que cuando asumí la función pública y durante mi gestión como Director del Hospital Municipal Irurzun de Quequén, fueron críticos de mi accionar por no conceder sus peticiones que a mi entender no correspondían.
Ahora es inentendible que el sindicato que debería defender mis derechos (Asociación Sindical de Profesionales de la Salud de la Provincia de Buenos Aires – CICOP ), ni siquiera se haya puesto en contacto conmigo ante tamaña injuria, tomando posición y juzgando a mi persona en las redes sociales.
La justicia dirá si me cabe responsabilidad o no, aunque en realidad ya me siento condenado socialmente.
Hoy convivimos en una sociedad que lucha por la igualdad, y es genial, porque la comparto; pero hemos ido perdiendo otros valores como dignidad, honestidad, sinceridad, humanidad, entre otros. Solo pretendo que la justicia actué con ese nivel de igualdad que toda la sociedad pretende y sabiendo que el daño que he recibido ya es irreparable y que es una condena en sí mismo.
No pretendo defender a nadie y no conozco a este profesional que supongo que estaba en ése puesto por mérito e idoneidad. Dicho esto, entiendo que no estamos en una sociedad que aspire a la igualdad. Acá un sindicalista tiene poder e inmunidad. Ni hablar de senadores y diputados. El país necesita urgente que la justicia actúe como corresponde. Aplicando la misma ley para todos.
Personalmente. No conozco a ningún sindicalista honorable.