Instantes de terror vivió un matrimonio cuando notó que su pequeño de solo dos semanas de vid no respiraba. Desesperados llegaron hacia las puertas del Centro de Operaciones y Monitoreo, donde se encontraba una trabajadora de SAME. Alma Cristal pudo salvar la vida del bebé.
Sus padres habían llevado allí al niño, en estado total de desesperación sin poder entender que sucedía y porque no tenía signos vitales. En ese preciso instante, en el que todo parecía oscuro, apareció Alma Cristal, la operadora de SAME que pudo salvarlo mediante maniobras de RCP. La mujer se encontraba esa noche de guardia con los demás operadores del COM.
En diálogo con un medio de comunicación marplatense, Alma Cristal Barraza (45), que trabaja en SAME desde hace 5 años, contó detalles de ese hecho inolvidable.
Al respecto dijo, “Vi a un compañero que salió corriendo hacia la puerta, se escuchaban gritos de pedido de auxilio, y ahí salí corriendo. No sabíamos qué pasaba, si habían robado, agredido a alguien. Cuando estas personas se acercan y me dan al bebé, me dicen: “salvame a mi hijo´”.
“El bebé estaba sin signos vitales y estaba morado, no estaba reactivo. Ahí, en ese momento, no perdí tiempo lo puse en posición de reanimación, le hice masajes columna, golpes secos con mucho cuidado. Sabía que lo tenía que sacar y empecé a hacerle RCP”, contó.
“Empecé a ver reacciones y le decía: Dale bebé, dale bebé. En un momento hizo una fuerza, un gemido y listo veo que le sale flema se al saco. Automáticamente empezó a cambiar de color y le soplé la cara, el daba aire de mi boca y lo pude salvar” finalizó satisfecha de haber podido salvar a ese pequeño de tan solo 17 días de vida.
