Una denuncia presentada por tres comercios dieron pie a la investigación de la Fiscalía de Delitos Económicos.
Un recluso de la unidad penal 15 de Bataan fue acusado de usar tarjetas de crédito clonadas o robadas para comprar en tres comercios en Mar del Plata.
El fiscal de delitos económicos, a cargo de David Bruna inició una investigación basada en denuncias de negocios damnificados y pudo determinar que varias personas cercanas a los delincuentes estaban involucradas en la actividad delictiva.
Según informó el diario La Capital, los hechos se remontan a agosto y septiembre, cuando una tienda de artículos sanitarios, una mueblería y un negocio de colchones de las regiones de Jara e Ituzaingó recibieron una gran cantidad de compras telefónicas.
En todos los casos, estas operaciones se realizaron a través de una línea telefónica, proporcionando el comprador un número de tarjeta y un código de seguridad.
Dado que los dos números corresponden uno a uno y dan la identificación de una tarjeta válida, todos los comerciantes avalan la venta y coordinan los envíos. Como parte de su estrategia, los estafadores enviaron el mismo transportista a las tres ubicaciones, utilizando un camión utilitario blanco.
Lo singular de esta historia es que los delincuentes compraron productos de higiene, cajas de resortes y un carrito de juguete a pilas en una mueblería del local de la calle Güemes. Algunos de estos productos se lanzan en la tienda en línea a precios muy bajos.
A los pocos días, cada empresa fue alertada y presentaron denuncias por no reconocimiento de los pagos, lo que motivó la intervención de la Fiscalía de Delitos Económicos.
La investigación del fiscal Bruna fue apoyada por la unidad de ciberdelincuencia de la DDI Mar del Plata, que rastreó los celulares utilizados en la compra, encontrando uno de ellos en una celda de la unidad penal 15 de Batán. Más tarde, aparecieron abonados relacionados con un interno de esa celda y hasta el fletero.
Durante la tarde del viernes, la DDI allanó la celda que ocupaba el preso Ignacio Gabriel Catán y otras seis viviendas en distintos puntos de la ciudad de Mar del Plata.
La policía logró recuperar el teléfono móvil, incautó el camión utilizado para la entrega y encontró una pequeña cantidad de productos comprados con tarjetas falsas.
Dado el presunto delito (defraudación por uso ilegal de datos de tarjeta de crédito), ninguno de los procesados ha sido detenido. En tanto, Catan -quien tiene antecedentes por varios delitos entre ellos contra la integridad sexual- se le abrió una nueva causa y se le retiró todo equipo de comunicación.