Una familia de turistas oriundos de Olavarría sufrió un robo en su auto estacionado en el sector del Casino. Los ladrones se llevaron objetos personales y $50.000 en efectivo. La denuncia fue realizada en la comisaría tercera, pero aún no se tienen novedades. “Frenamos en el Casino, bajamos una hora a la playa a tomar mate y cuando volvimos no teníamos nada” expresaron, y agregaron “Solo tenemos lo puesto; la ropa y el equipo de mate, nada más”.
Una familia de Olavarría se encontraba disfrutando de un día de playa cuando sufrieron una desagradable sorpresa. Alrededor de las 17:00 hs estacionaron su auto en un lugar lleno de vehículos en el casino y se dirigieron a la playa a tomar mate en el transcurso de una hora. Sin embargo, al regresar a su auto encontraron que se habían llevado todas sus pertenencias.
Actualmente se encuentran en la comisaría tercera esperando novedades. Se comunicaron con Diario Necochea a través del WhatsApp (2262 356811) en busca de sus pertenencias.
En diálogo con este medio, los turistas relataron haber perdido efectivo por un valor total de $50.000 y varios objetos personales, como 2 bolsos negros con ropa, zapatillas nuevas sin uso, carpa, 2 mochilas negras, lentes de contacto, elementos de higiene y una conservadora. Solo les dejaron la ropa que llevaban puesta y los elementos necesarios para tomar mate.
La denuncia fue realizada en la comisaría tercera y, a pesar de ello, siendo las 21:45 del 8 de febrero del 2023, la familia aún se encuentra en la comisaría esperando novedades sobre su caso. Desesperados por recuperar sus pertenencias, los turistas pidieron ayuda a los vecinos y expresaron su esperanza de recuperar alguna de sus cosas.
“Bajamos una hora a la playa a tomar mate y cuando volvimos no teníamos nada. Estábamos esperando la hora para ingresar al camping, teníamos los bolsos, billeteras, mochilas, conservadora, carpa, todo” denunciaron”, y agregaron que “es injusto tener que vivir así, en un ratito te sacan todo lo que tenías”.

La familia mencionó a Diario Necochea que había policías locales en el estacionamiento y una gran cantidad de gente, incluyendo otras personas que estaban estacionando sus autos. Además, el lugar contaba con dos cámaras de seguridad que supuestamente debían garantizar la seguridad de los automóviles y de las personas. A pesar de la presencia policial y de la tecnología de seguridad, el robo ocurrió en pleno día y en una zona concurrida. Esta situación genera dudas sobre la eficacia de las medidas de seguridad implementadas en el lugar.