El IPC de Argentina registró una variación interanual del 102,5% en febrero, la más alta en 32 años, mientras que la inflación del mes fue del 6,6%. El sector de Alimentos y Bebidas lideró el aumento de precios, con la carne siendo el producto con mayor impacto en la inflación. La incertidumbre sobre la inflación futura es alta debido a las condiciones macroeconómicas desfavorables.
Título: Inflación en Argentina: IPC de febrero registra la variación interanual más alta en 32 años
El Índice de Precios al Consumidor (IPC) de Argentina registró una variación interanual del 102,5% en febrero, la más alta en 32 años, según informó el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC). La inflación de febrero fue del 6,6%, lo que supone una aceleración de 0,6 puntos porcentuales en comparación con el 6% registrado en enero.
La situación es preocupante, ya que la inflación se ha mantenido al alza durante los últimos cuatro meses, desde el 4,9% registrado en noviembre. A pesar de los programas de control de precios implementados en diversos sectores, los precios continúan en una senda alcista.
El sector de Alimentos y Bebidas fue el que más aumentó durante el mes de febrero, con una subida del 9,8%, siendo la carne el producto que más impacto tuvo en la inflación. Los productos cárnicos, como el asado (28,6%), la carne picada (35%), paleta (33,5%), cuadril (34,3%) y nalga (32,8%), fueron los que registraron un mayor aumento. Además, la naranja lideró el listado de subas, con un 72% de aumento respecto al mes anterior.
La incertidumbre sobre la inflación futura es alta. El IPC Núcleo, que excluye los precios regulados y estacionales, se ubicó en un preocupante 7,7% a nivel nacional en febrero, 1,1 puntos porcentuales por encima del IPC general. En algunas regiones del país, el aumento en los bienes quintuplicó el de los servicios, que deben seguir en un camino de descongelamiento para cumplir con las metas fiscales establecidas en el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional.
A pesar de las expectativas de que la inflación se desaceleraría en los próximos meses, las condiciones macroeconómicas empeoran la situación. La sequía ha generado una escasez de dólares para las reservas y se espera que aumente la brecha cambiaria y la emisión monetaria para cubrir los desbalances.